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Los Caníbales,de Manoel de Oliveira
SATURA TOTA NOSTRA EST
Los caníbales es una obra de formato complejo y no por la historia en sí, que es simplemente delirante, sino por su mezcla de estilos,desde la ópera a la fábula pasando por la sátira ,todo ello bien aderezado, y no en coctelera sino en atanor que Oliveira maneja como experimentado alquimista , para sacar esa esencia en forma de baile tremendo ,surrealista, con el que concluye este trabajo ; allí en una bella quinta portuguesa están los descendientes de Aarón bailando en torno a él ; sólo que Oliveira no lo va a hacer de oro,habla a las claras y lo viste de cerdo. Más claro, el agua.
RAN
The ultimate example of chaos is the absence of gods. When Hidetora sees Lady Sué, a devout Buddhist and the most religious character in the film, he tells her, "Buddha is gone from this miserable world." Sué, despite her belief in love and forgiveness, eventually has her head cut off. When Kyoami claims that the gods either do not exist or are the cause of human suffering, Tango responds, "[The gods] can't save us from ourselves." Kurosawa has repeated the point, saying "humanity must face life without relying on God or Buddha." The last shot of the film shows Tsurumaru standing on top of the ruins of his family castle. Unable to see, he stumbles towards the edge until he almost falls over. He drops the scroll of the Buddha his sister had given him and just stands there, "a blind man at the edge of a precipice, bereft of his god, in a darkening world." This may symbolize the modern concept of the death of God, as Kurosawa also claimed "Man is perfectly alone... [Tsurumaru] represents modern humanity."
From wikipedia
Capturando la obra pictórica o...?
A sentarse, a relajarse para adentrarnos a través de 3 horas y 40 minutos en el proceso creativo; la búsqueda de lo invisible, de la desnudez más completa;
Tengo que ver, te persigo y llegaré hasta la extenuación hasta encontrarte; una vez que logre atraparte en el lienzo, te guardaré para que nadie te vea.
Jacques Rivette narra o mejor acompaña en este proceso al pintor. Para aquellos que hayan visto esa obra maestra de Víctor Erice el sol del membrillo estamos ante un proceso similar pero Erice acaba encontrando y poniendo en imágenes la poesía escondida, ansiada, buscada. Jacques Rivette opta por callar y esconder debajo de una tela, detrás de un muro el secreto.
No puedo compartir el criterio pues el Arte está para mostrar salvo que Jacques apunte más allá y su obra no sea sino una gran metáfora de la imposibilidad del desvelamiento del secreto último.
Pero, tortura y dolor no son necesariamente el camino. Víctor Erice lo puso de manifiesto y tantos otros, o no tantos.
Cine de peso, palabras mayores que nos dejan con una pregunta ¿por qué esconder? Quizás sea tan íntimo que nadie habría de creerme, déjame que lo guarde para mí aún a costa de que digan "no quisiera acabar mis días de pintor como usted" mientras agradecido por la sinceridad de esas palabras, respondo " sigue así, no cambies...
Poema de "El espejo" de Andréi Tarkovski
“…corrías y me llevabas suave dentro de la húmeda lila a tus dominios insondables por la otra parte del espejo…”
Primeros encuentros
Cada momento de nuestros encuentros
celebrábamos como la Epifanía,
solos en este planeta. Fuiste
más valiente y más ligera que el ala de un pájaro
bajando la escalera de dos en dos,
como vértigo, llevándome a través
de lilas mojadas a sus predios,
al más allá del espejo cristalino.
Cuando llegó la noche tuve la gracia,
se abrieron las puertas del altar,
en la oscuridad resplandecía
y se reclinaba lentamente la desnudez.
Y yo, al despertar, decía: “¡Sé bendita!”
porque sabía que era audaz mi bendición.
Tú dormías, pero las lilas de la mesa
se disponían a tocar tus párpados
con el azul del universo circundante,
los párpados, tocados por el color azul,
estaban muy tranquilos, tu mano cálida también.
En el cristal pulsaban tantos ríos,
montañas humeaban y mares despuntaban,
tenías en tu palma un globo cristalino,
estabas durmiendo en el trono.
¡Dios justo! Tu eras mía.
Te despertaste para transformar
el vocabulario humano, usado cada día,
y el lenguaje se llenó hasta el tope
de fuerza sonora, y la palabra tú abrió su acepción nueva, que era el zar.
En el mundo se ha transformado todo,
incluso cosas tan sencillas como el jarro y la palangana,
y el agua dura y laminada
estaba de guardia entre nosotros.
Algo me llevaba no sé adonde.
Nos cedían paso, como espejismos,
ciudades construidas por milagro,
la menta, cual alfombra, se acostaba bajo nuestros pies,
los pájaros nos acompañaban haciendo el mismo camino,
los peces subían el río
y el cielo se abrió ante nuestros ojos...
El destino seguía nuestra pista
como un loco con navaja afilada.
Arseni Tarkovski
Traducción:
Enrique Turover
Fuente:
http://www.andreitarkovski.org
Estrategias de visualización de lo invisible
Antes de entrar en la película permitidme reproducir algunas consideraciones de José Luis Guerin, las encontré en una entrevista publicada en Lateral 106, octubre de 2003
Dice el cineasta “no sé si he enfocado especialmente el tema de la memoria y el territorio, porque precisamente eso es por definición el cine, ¿no?, casi cuando aprietas el obturador de la cámara sabes que estás convirtiendo ese presente en pasado, que estás reteniendo lo que será un pedazo de memoria consubstanciada en cine.”
“La realidad no se deja capturar así por las buenas, creo que siempre obedece a una estrategia la captura de la realidad…mi caso es una serie de estrategias para visualizar cosas que si no permanecerían ocultas en la cotidianeidad, un niño que cruza un valle para ir a su colegio, si no lo filmas bien y buscas los momentos emblemáticos, significantes de ese trayecto no ves nada”
“Su obra puede ser leída como una poesía fílmica sobre la destrucción. De una forma de vida en Innisfree …en Innisfree el montaje remitió un poco a eso: empecé mostrando el mundo más arcaico, los trabajos más ancestrales, la recolección de algas, y progresivamente se ve cómo se va contaminando por así decirlo, ese mundo: el turismo, las televisiones, la música de ACDC están ahí, son desde luego mundos que desaparecen.”
He encontrado interesante empezar por aquí, por lo que pudiera rastrear en la idea del cineasta.
Es cierto que un gran tema en Innisfree es la progresiva desaparición de un modus vivendi, un modelo social que desaparece por un modelo global que agota las culturas, las dilapida y las sustituye por un modelo unitario, globalizado y vacío, un modelo del desencanto de las apariencias. Dice una irlandesa tras un tiempo en USA algo así como “estaba harta de los americanos, sólo piensan en trabajar para hacer dinero”; curiosamente a su vuelta a Innisfree ,que no ha escapado al modelo de globalización, se ve abocada a un ridículo stand turístico con la foto de John Wayne, todo muy americano.
Ese modus vivendi que desaparece lo hará cuando pasen a mejor vida sus protagonistas, muchos de ellos ya octogenarios; Entonces sólo quedará el fiel testigo del territorio, los árboles del bosque que adquieren tintes protagonistas capturados por el cinematógrafo, por la fotografía objeto del mismo. Quedará el río y quedarán las piedras y también nos quedará la obra de José Luis Guerin, su poética atrapada en celuloide.
La Luz captada, su mirada, testigo del perenne movimiento desencadenado por el incesante suceder de generaciones, de lo viejo a lo nuevo, de lo nuevo a lo viejo magistralmente recreado en una escena de la obra. Y así nos hace percibir que hay un sustrato que permanece al modo de un Herman Hesse del cinematógrafo.
Captarlo en tan diversos momentos y muy especialmente en el baile responde a esas estrategias de las que nos habla el cineasta; son tan diversos los momentos a destacar que me gustaría ir desgranando poco a poco ,pero os dejo en el disfrute de poder hacerlo personalmente. Yo me quedaré con la gente, con las canciones, en la noche, en el Pat Cobham Pub.
Bergman, constructor
"Independientemente de si soy cristiano o pagano, trabajo en la edificación común de la catedral porque soy artista y artesano, y porque he aprendido a formar de la piedra caras, miembros y cuerpos".
Ingmar Bergman
Luz Silenciosa, dirigida por Carlos Reygadas
La batalla de la conciencia
Esta película ha sido toda una sorpresa para mí. Hacía tiempo que no veía un cine tan contemporáneo, fresco y una mirada tan profunda y deliberadamente aséptica.
Está amaneciendo y durante largos minutos asistiremos al comienzo de un nuevo día, el sol sale y la cámara empieza a observar lo que sucede a su alrededor pero sin tiempo. De hecho el protagonista en uno de los primeros planos detiene el reloj. Al terminar la película la cámara se dirige al horizonte y la noche se hace en la pantalla.
El proceso interno de una conciencia despierta (la del protagonista) es el gran tema de Luz silenciosa y las fatídicas consecuencias que pueden derivarse de nuestras acciones. El poder de las pasiones no controladas que llevan al protagonista a confesar “lo he intentado pero es más fuerte que yo”. Por más que el desenlace es el que es, el director no emite juicio alguno, un ojo ciertamente imparcial recorre la cinta, simplemente observa y muestra y eso es ciertamente meritorio.
El protagonista no puede menos que generar nuestra comprensión, compasión, como ser humano preso de una lucha interna que lo está demoliendo internamente.
No conocía a los menonitas, y la película por este motivo es también sumamente interesante destacando la actitud del pastor (padre del protagonista), muy lejos de una actitud moralizante, de una visión pecaminosa y culposa tan afín a los modos que aquí solemos conocer, encarna un nivel humano de compresión, juicio y ponderación y levísima sugerencia a su propio hijo que despierta admiración.
Aventuras de dos masones

El hombre que pudo reinar es un ejemplo del cine clásico por excelencia , sus elementos son de alta calidad , Sean Connery y Michael Caine, el guión inspirado en un relato de Rujard Kipling, éste, masón, como los personajes de la historia y una dirección de mano clásica, John Huston. Si se unen tantos elementos la garantía del resultado cuando menos es esperanzadora y el resultado es genial, cine clásico puro y con contenido.
La disertación moral es frecuente en Huston, valga recordar la maravillosa El tesoro de Sierra Madre sobre la locura originada por el dinero. Aquí el tema de disertación es la locura sobrevenida por el poder. Aunque aquí las cosas están suavizadas y el tono de simpatía generada no desaparece, sencillamente porque los personajes son entrañables. Sólo al final con la sonrisa aún dibujada se impone una reflexión más seria.
El relato de kipling no deja de ser disertación también sobre el origen de la Orden masónica. Aparece como planteamiento en la conversación que éste mantiene con el gobernador y lo desarrollado posteriormente no es sino una confirmación del origen disperso pero antiguo de al menos la simbología empleada por la Orden.
Prima a mi modo de ver un espíritu de un honor extraño pero que sabe reconocer al menos una idea clara, un límite infranqueable, cual es la fraternidad que viven los hijos de la Viuda, aunque incoherencias acompañen ese desarrollo, como por otro lado es natural siendo hombres que no dioses como Sean Connery llega a creer.
Este cine no muere, sigue vivo, sus historias son inmortales porque así lo son las pasiones del hombre que describen.
El cine de John Huston está vivo, tan vivo como cuando fue realizado. Y las historias de kipling son historias maduras de hermanos en el camino hacia la ciudad de Sinkara…o era Itaca?
Que mejor que el propio Kipling para narrarlo
"Allí estaban Rudle, el jefe de estación,
Peazley, de la Sección de vías y Trabajos,
Ackman, de Intendencia,
Donkin, funcionario de la Prisión
y Blake, el Sargento Instructor que fue dos veces nuestro Venerable;
y también estaba el viejo Franjee Eduljee, dueño del almacén “Artículos Europeos”.
afuera nos decíamos “Sargento “o “Señor” ; "Salud” o “Shalom”;
adentro, en cambio, ”Hermano” y así estaba bien.
Nos encontrábamos en el Nivel y nos despedíamos en la Escuadra.
Yo era el segundo Diácono.
Estaban, también, Bola Nath,
Saúl el contador,
el judío de Aden,
Din Mohamed de la oficina del Catastro,
el señor Chuckerbutty
Amir Sing el Sikh
y Castro, del taller de reparaciones, que por cierto era católico romano.
Nuestros ornamentos no eran ricos
y nuestro Templo era viejo y desguarnecido,
pero conocíamos los Landmarks y los observábamos escrupulosamente....
A veces, cuando miro atrás, me viene a la cabeza este pensamiento:
“En el fondo no había incrédulos, al margen, quizas, de nosotros mismos.”
Y así cada mes, después de la Tenida, nos reuníamos para fumar.
No nos atrevíamos a hacer banquetes
por miedo a forzar alguna norma de cualquier hermano
y hablábamos a fondo de Religión y de otras cosas;
cada uno se refería al Dios que conocía mejor,
y los hermanos tomaban la palabra uno tras otro y nadie se inquietaba.
Nos separábamos con el alba,
cuando se despertaban las cacatúas
y los malditos mosquitos portadores de fiebre.
Entonces, volvíamos a caballo
Y, después de tantas palabras,
Dios, Mahoma y Shiva jugaban al escondite dentro de nuestras cabezas.
Muy a menudo, desde entonces, mis pasos errantes al servicio del Gobierno
han llevado mi saludo fraternal, desde Oriente a Occidente.
¡Cómo los recordaba! ¡Y cuantas veces he deseado volver a verlos a todos!
A todos los de Logia Madre.
¡Como querría volver a verlos!
A mis hermanos negros o morenos
y sentir el aroma de los cigarrillos indígenas
mientras deambulaba por allí el que encendía la luz
y el viejo de la limonada removía objetos por la cocina.
Y volverme a sentir un Masón perfecto una vez más,
en esta, mi Logia de hoy".
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